¡Oh, cielos! Zamora
Hoy repasaremos la campaña que se vio interrumpida por la aparición del maldito coronavirus.
A principios de año estudiamos elaborar una campaña promocional de Zamora en Madrid, una iniciativa organizada por el Ayuntamiento, la Diputación de Zamora y la Junta Pro Semana Santa. Una maravilla ver como estas instituciones de nuestra provincia unen fuerzas apostando por un bien común. La campaña se publicaría en las vallas del Metro de Madrid, esa maraña de túneles por donde pasa nuestro público objetivo: dos millones de ojos al día.
La campaña "¡Oh, cielos! " fue pensada como escape visual para todos los usuarios del metro, en un intento de fabricarles una ventana al cielo. En los noventa se popularizó "de Madrid al cielo" una castiza muletilla que hoy modificamos, tras ver los cielos de nuestra provincia, para gritar "de Madrid a Zamora"
En esta campaña todo gira alrededor de una pregunta realizada a los usuarios del metro: ¿necesitas salir a que te dé el aire?. La respuesta evidentemente es SI, por la claustrofobia del lugar, porque en el Metro escasean los espacios abiertos y los cielos espectaculares que abundan en Zamora... por todo.
Las vallas, de 4x3 metros, son básicamente fotográficas. Se seleccionaron unas panorámicas espectaculares (de entre los fabulosos fotógrafos de la tierra) con la única obligación de que tuvieran cielo, muchísimo cielo y flotando sobre ellas los elementos gráficos: la exclamación (Oh cielos), la ubicación (Zamora), la pregunta y los logos. Se decidió que todos los diseños deberían compartir la misma estructura: una ventana a Zamora con una celosía de pequeñas molestias visuales, que acentúen la repetición de los mensajes y que motiven al observador a visitar Zamora en realidad.
Evidentemente los diseños correspondientes a la Pasión y la propia Semana Santa se quedaron congelados hasta el año próximo.
Y que mejor manera de ilustrar la campaña que mostraros los diseños que se repartieron por las diferentes estaciones.
Viendo ahora estas estampas, sólo puedo pensar que si no conociera Zamora me encantaría hacerlo.
Y exclamaría ¡Oh, cielos!.
:-O
A principios de año estudiamos elaborar una campaña promocional de Zamora en Madrid, una iniciativa organizada por el Ayuntamiento, la Diputación de Zamora y la Junta Pro Semana Santa. Una maravilla ver como estas instituciones de nuestra provincia unen fuerzas apostando por un bien común. La campaña se publicaría en las vallas del Metro de Madrid, esa maraña de túneles por donde pasa nuestro público objetivo: dos millones de ojos al día.
La campaña "¡Oh, cielos! " fue pensada como escape visual para todos los usuarios del metro, en un intento de fabricarles una ventana al cielo. En los noventa se popularizó "de Madrid al cielo" una castiza muletilla que hoy modificamos, tras ver los cielos de nuestra provincia, para gritar "de Madrid a Zamora"
En esta campaña todo gira alrededor de una pregunta realizada a los usuarios del metro: ¿necesitas salir a que te dé el aire?. La respuesta evidentemente es SI, por la claustrofobia del lugar, porque en el Metro escasean los espacios abiertos y los cielos espectaculares que abundan en Zamora... por todo.
Las vallas, de 4x3 metros, son básicamente fotográficas. Se seleccionaron unas panorámicas espectaculares (de entre los fabulosos fotógrafos de la tierra) con la única obligación de que tuvieran cielo, muchísimo cielo y flotando sobre ellas los elementos gráficos: la exclamación (Oh cielos), la ubicación (Zamora), la pregunta y los logos. Se decidió que todos los diseños deberían compartir la misma estructura: una ventana a Zamora con una celosía de pequeñas molestias visuales, que acentúen la repetición de los mensajes y que motiven al observador a visitar Zamora en realidad.
Evidentemente los diseños correspondientes a la Pasión y la propia Semana Santa se quedaron congelados hasta el año próximo.
Y que mejor manera de ilustrar la campaña que mostraros los diseños que se repartieron por las diferentes estaciones.
ZAMORA CIUDAD
ZAMORA PROVINCIA
SEMANA SANTA
Viendo ahora estas estampas, sólo puedo pensar que si no conociera Zamora me encantaría hacerlo.
Y exclamaría ¡Oh, cielos!.
:-O
